Biden ajusta su agenda y estrategia tras desafíos en debate presidencial

Washington. El presidente estadounidense, Joe Biden, reveló en una reunión con gobernadores demócratas en la Casa Blanca el miércoles pasado que ajustará su rutina para mejorar su salud y rendimiento. Según varios medios de EE.UU., Biden admitió la necesidad de dormir más y evitar eventos después de las 20:00 horas.

Durante el encuentro con más de veinte líderes de su partido, Biden buscó transmitir una imagen de calma sobre su capacidad para ganar las elecciones, reconociendo que reducirá sus horas de trabajo cara a la campaña electoral. También mencionó su reciente esfuerzo excesivo durante viajes internacionales previos al debate, ignorando recomendaciones sobre su horario.

En respuesta a preguntas sobre su salud, Biden aseguró estar "bien", comentando con humor: "Solo es mi cerebro", según reportó The New York Times. Este ajuste en la agenda y la estrategia del presidente surge en medio de presiones dentro de su propio partido y críticas públicas tras su actuación en el primer debate presidencial contra el expresidente Donald Trump.

Dos encuestas recientes, una del Wall Street Journal y otra de The New York Times, han mostrado un aumento en las preferencias hacia Trump en estados clave después del debate, lo que ha intensificado la atención sobre la campaña de Biden y la estrategia demócrata de cara a las elecciones del 5 de noviembre.

El encuentro con los gobernadores demócratas se produjo poco después de que la secretaria de prensa de la Casa Blanca eludiera preguntas sobre si Biden había sido sometido a algún chequeo médico post-debate, subrayando la preocupación y la evaluación continua sobre su desempeño y estado de salud.

Este ajuste estratégico busca fortalecer la imagen del presidente y su capacidad para competir en una campaña electoral cada vez más disputada y crítica para el futuro político de Estados Unidos.