París. A pocos días de la segunda vuelta de las elecciones legislativas en Francia, el bloque de Marine Le Pen, parece estar lejos de alcanzar la mayoría absoluta, con una proyección de entre 159 y 183 diputados. Mientras tanto, la coalición Juntos por la República, liderada por el presidente Emmanuel Macron, obtendría entre 110 y 136 legisladores, y el partido conservador Los Republicanos alcanzaría entre 30 y 50 escaños en la Asamblea Nacional.
Un reciente sondeo también destaca la retirada de 2018 candidatos de varios partidos, en un intento por reducir las posibilidades de que la Agrupación Nacional de Le Pen domine la Cámara Baja del Parlamento. Este movimiento estratégico busca influir en la distribución de los escaños y limitar el poder del bloque liderado por Le Pen.
La recta final de la campaña ha estado marcada por varios incidentes, entre los que se destaca la agresión física sufrida por Prisca Thevenot, portavoz de Macron y candidata en estas elecciones. Este y otros ataques han aumentado la tensión en los días previos a la segunda vuelta, subrayando la polarización y los desafíos que enfrenta el país en este proceso electoral.
Con las elecciones a la vuelta de la esquina, los partidos continúan sus esfuerzos para movilizar a los votantes y asegurar sus posiciones en la Asamblea Nacional. La situación sigue siendo dinámica y los resultados finales determinarán el equilibrio de poder en el Parlamento francés para los próximos años.
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