París - La esperanza de toda una ciudad se centraba en Kylian Mbappé para llevar al París Saint-Germain a la final, en lo que podría haber sido su despedida triunfal. Sin embargo, el astro no logró brillar en su último partido en el Parque de los Príncipes en Europa.
A pesar de su temporada irregular, Mbappé ha sido un pilar en el PSG, contribuyendo con goles y asistencias en la mayoría de los partidos europeos recientes. Pero en esta ocasión, se vio frustrado por la sólida defensa del Borussia Dortmund y no pudo marcar la diferencia.
El rostro de decepción al final del partido reflejaba el sentimiento compartido por toda la ciudad, que veía en Mbappé la esperanza de alcanzar la gloria. Ahora, el jugador se prepara para su último partido en casa con el PSG, enfrentando incertidumbre sobre si será homenajeado o abucheado.
Con la partida inminente de Mbappé, el PSG parece entrar en una nueva era bajo la dirección de Luis Enrique, quien ha sabido conectar con la afición y construir un proyecto colectivo. Aunque los éxitos europeos no han llegado, la ilusión en París es palpable como nunca antes, lo que podría marcar el comienzo de una nueva era para el club.
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