Roberto Herrera Cáceres: “La Constitución debe respetarse y aplicarse en todo tiempo”
- Ricardo I. Zapata

- 7 nov
- 2 Min. de lectura

Tegucigalpa.– El ex Comisionado Nacional de los Derechos Humanos, doctor Roberto Herrera Cáceres, afirmó que la Constitución de la República debe ser respetada y aplicada sin excepción, especialmente ante las actuales tensiones políticas y electorales. Según el exfuncionario, en el contexto del proceso electoral de 2025, existen posturas y decisiones que responden más a intereses partidarios que al mandato constitucional, lo cual pone en riesgo la estabilidad democrática del país.
Herrera Cáceres señaló que la Carta Magna es la base jurídica y política del Estado hondureño, por lo que cualquier decisión que contradiga su supremacía es nula y genera responsabilidades legales. En ese sentido, criticó los conflictos entre el Tribunal de Justicia Electoral (TJE) y el Consejo Nacional Electoral (CNE), advirtiendo que ambos órganos deben respetar las competencias que la Constitución les otorga, sin interferir en los ámbitos exclusivos del otro.
El ex Comisionado también cuestionó la actuación de la Corte Suprema de Justicia al admitir una petición de antejuicio contra dos magistrados del TJE sin la deliberación del pleno. A su juicio, este procedimiento debió canalizarse mediante el Juicio Político, mecanismo previsto constitucionalmente para evaluar a funcionarios de alto rango. Asimismo, denunció irregularidades en la Junta Directiva del Congreso Nacional, a la cual acusó de extralimitarse en sus funciones administrativas y desconocer la voluntad de la mayoría legislativa.
Finalmente, Herrera Cáceres alertó sobre el riesgo que representa la prolongación del estado de excepción durante el proceso electoral, al considerar que esta medida limita derechos ciudadanos y puede afectar la transparencia de las elecciones generales de noviembre. El defensor de derechos humanos reiteró que la Constitución debe prevalecer sobre cualquier interés político o circunstancial, como garantía de la democracia pluralista y del Estado de Derecho en Honduras.







Comentarios