Yum Brands demanda al IRS por disputa fiscal de 4 mil millones de dólares

Sala de redacción. La multinacional Yum Brands, propietaria de cadenas como KFC, Taco Bell, Pizza Hut y Habit Burger, presentó una demanda contra el Servicio de Impuestos Internos (IRS), de Estados Unidos, tras una disputa relacionada con supuestas deficiencias fiscales entre 2013 y 2015. El reclamo del IRS asciende a más de 4 mil millones de dólares, incluyendo intereses y sanciones, lo que ha generado una respuesta legal por parte de la compañía.

Según Yum Brands, las acusaciones del IRS derivan de una auditoría sobre una reorganización interna implementada en 2014, con el objetivo de reestructurar su portafolio global. Como parte de esta estrategia, la empresa realizó operaciones de intercambio de deuda por acciones, amparadas —según argumenta— en el código fiscal vigente, siempre que se cumplan ciertos requisitos. Yum asegura haber cumplido con estas condiciones y sostiene que no existen ingresos gravables asociados a dichas operaciones.

En su defensa, presentada el 4 de junio ante el Tribunal Fiscal de Estados Unidos, Yum Brands también exige reembolsos netos superiores a los 26 millones de dólares correspondientes a los ejercicios fiscales de 2013 y 2015. La compañía advirtió que, de no prosperar su postura, una resolución adversa podría afectar seriamente sus estados financieros a futuro, tal como lo reconoció en su reporte 10-K a finales de 2024 ante la Comisión de Bolsa y Valores.

Pese al conflicto con el IRS, Yum Brands continúa expandiéndose. En el primer trimestre de 2025, reportó un crecimiento del 5 % en sus ventas globales y abrió 751 nuevas tiendas. Además, anunció el traslado de algunas de sus oficinas principales dentro de Estados Unidos y formalizó un plan de sucesión para reemplazar a su actual CEO, David Gibbs, quien dejará el cargo en 2026. Mientras tanto, la batalla fiscal con las autoridades estadounidenses sigue en desarrollo.